el fuego y la lluvia son un recurso recurrente en el cine y la literatura para simbolizar la purificación. lo vemos en la deliciosa escena final de Magnolia donde la lluvia acompaña a los protagonistas.
El 2012 se fue con lluvia y dio paso a un primer día de 2013 soleado. Toda la mierda, la mala energía, el negativismo parecía haber sido limpiado y barrido para comenzar un año sin lastres.
A 22 de enero los recortes siguen su curso, en Castilla y León y en Castilla la Mancha se eliminan guardias nocturnas en los centros de salud del mundo rural, jugando así con las vidas de los habitantes de esas comarcas. En Madrid el gobierno autnómico no cede a la presión ciudadana contraria a la privatizaicón de la sanidad porque parece ser que ceder es de débiles y supone perder.La corrupción sigue su curso y se descubre que mientras eliminan derechos, otros agrandan los bancos suizos y reparten sobres sin contar con correos o hacienda. El paro aumenta y hay quienes dicen que las personas desempleadas tienen demasiados privilegios.
Por suerte sigue lloviendo, ¿lo hará tanto para paliar tanta necesidad de purificación?
Cantemos bajo el diluvio.