Hace unos días fui al videodebate que desde el 15mPalencia se organizaba para reflexionar sobre el voto. En una de las intervenciones alguien dijo que no tenía ninguna confianza en los políticos, que todos ejercían esa profesión para ganar dinero (lo que ratificaba con el hecho de que por cada voto obtenido en las elecciones se les reportara dterminada cantidad de euros).
Qué horror pensé yo. Si no hay esperanza en que alguno de esos ciudadanos que se meten en política lo hagan por ideales, por principios y por intentar cambiar las cosas a mejor... mal vamos, que cada cuatro años muchos les damos un voto. Y es que, si no creemos en el ser humano, qué mundo más triste éste en el que vivimos. Todo desesperanza, todo maldad, todo un sin sentido.
Aunque otros los tapen sí hay personas, porque los políticos no son otra cosa que eso, ciudadanos, con buenas intenciones, que realizan su trabajo con profesionalidad, conscientes de los problemas vigentes y que intentan solucionarlo. Los hay. Pero también hay que querer verlos.
